El tratamiento que se recibe al tener esta enfermedad, va a depender del tipo de ataque cerebrovascular que se haya sufrido y del tiempo en que el paciente se tardó para recibir atención médica adecuada.
Cuando se ha establecido que la persona posee un ataque cerebrovascular isquémico, se procede a realizar un tratamiento llamado trombólisis intravenosa, en donde se inyecta vía venosa un medicamento trombolítico. Este fármaco es llevado por la sangre hasta el cerebro con el fin de diluir el coágulo o trombo que está bloqueando el flujo de sangre.
¡Cuanto más rápido se administre este medicamento, más rápido se podrán evitar secuelas!
Si el paciente que sufre el ataque cerebrovascular no puede recibir este medicamento, o no llega a tiempo al centro médico, este podrá recibir un tratamiento distinto. Los cuales pueden ser:
Para este tipo de ACV, el tratamiento dependerá del tipo de hemorragia que se posea y si esta fue dentro o fuera del tejido cerebral. Sin embargo, las opciones más utilizadas son:
¡Actúe a tiempo!
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