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Cómo tener hábitos saludables en el trabajo

Hábitos saludables

Habitos saludables

Tener hábitos saludables nos ayuda a prevenir enfermedades serias como cáncer o para evitar ataques cerebrovasculares (ACV). Aunque no siempre es fácil llevar una vida sana por el ritmo en el que vivimos y por las condiciones propias de la sociedad, si podemos tomar medidas y precauciones para ayudar a nuestro cuerpo a estar indemne. 


En esta oportunidad queremos darte algunos consejos para tener
hábitos saludables en escenarios laborales. Así que continua leyendo para conocer estos tips para que tu vida profesional no afecte tu salud. 


Cuida tu alimentación


La alimentación es fundamental para mantenernos sanos, el problema es que el ritmo de vida en el que estamos nos ha hecho cambiar la manera de alimentarnos teniendo un efecto directo en nuestro cuerpo. Esto se debe al poco tiempo que tenemos para cocinar y optamos por consumir alimentos ultra procesados y listos para calentar en el microondas, o si no recurrimos a los paquetes. Todos estos productos tienen niveles altos de calorías, azúcares y grasas. 


Solo para hacernos una idea de lo dañino que puede ser el consumo de los alimentos ultra procesados, vale la pena mencionar un reciente estudio presentado durante el Congreso Europeo de Cardiología de este año. 


Dicha investigación examinó la asociación entre el consumo de estos alimentos y el desarrollo de enfermedades cardiovasculares en un periodo de 10 años. En el estudio participaron 2020 personas (1014 mujeres y 1006 hombres) sin enfermedades cardiovasculares pero que consumían aproximadamente 15 raciones de alimentos ultraprocesados a la semana. 


Durante el periodo analizado, los investigadores encontraron que se produjeron 317 eventos cardiovasculares y cuya incidencia fue aumentando progresivamente a medida que los pacientes consumían más alimentos ultra procesados. Con un consumo medio semanal de 7.5, 13 y 18 raciones, la incidencia de enfermedades cardiovasculares fue del 8.1%, 12.2% y 16.6%, respectivamente.


Con esto dicho, miramos cómo puedes cuidar tu alimentación durante tus jornadas laborales. La clave aquí es dejar de tener ese pensamiento facilista de “no tengo tiempo, compro algo que ya esté listo”. 


  • Desayuno: muchas personas omiten esta comida y es una de las más importantes, sobre todo si debemos ir a trabajar, pues es la manera en la que nuestro cuerpo adquiere energía y nutrientes para ponerse en marcha, sobre todo si han pasado varias horas desde la última ingesta de alimentos. 


Desayunar ayuda a una correcta distribución de calorías a lo largo de la jornada. Esto significa que cuando desayunamos bien, tendremos la capacidad de aguantar más horas y así evitar que a la hora del almuerzo, e incluso antes, nos ataquen la ansiedad y unas ganas compulsivas de comer. 


  • Onces, medias nueves o entre comidas: evitar o saltarse comidas pone al cuerpo en un estado de alarma activando mecanismos de almacenamiento de grasas, para evitar esto es importante consumir algo a la media mañana y/o entre comidas. 


Te recomendamos ingerir una ración de fruta o cualquier otro alimento sin grasas saturadas. Sobre las frutas es importante mencionar que se deben comer por lo menos 3 raciones al día, siempre y cuando no sustituya el consumo de otros alimentos necesarios en la dieta. Además de las frutas, las mejores opciones son los alimentos frescos y poco procesados, frutos secos, un yogur o agua. 


Si no eres de consumir frutas puedes consumir ciertos alimentos cuya concentración de grasa saturada, calorías y azúcares sean bajas. En ese caso tendrás que fijarte muy bien en el etiquetado del producto que vayas a consumir. 


Las grasas saturadas no son buenas porque en el contexto de una dieta saludable, ya que eleva el colesterol y puede favorecer la arteriosclerosis y enfermedades cardiovasculares.


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  • Almuerzo: es normal que la hora de almuerzo nos agarre en plena actividad laboral, pero uno de los hábitos saludables es tomarse el tiempo adecuado para almorzar, sin prisas y muy importante también, comer sin distracciones y a la hora que es, pues muchas veces decidimos comer más tarde y esto no es una buena práctica. 


De acuerdo a investigadores, el almuerzo es un factor clave en la obesidad pues factores como el qué comemos y cuándo es decisivo para perder o ganar peso. Por ende, intenta cocinar y planificar una dieta como si estuvieras en casa, incorporando legumbres, verduras, pasta o arroz y una proteína. 


Aunque muchos de nosotros estamos en teletrabajo, estas recomendaciones también aplican, pues en ocasiones los horarios nos llevan a saltarnos comidas y a pedir domicilios por la “falta” de tiempo para cocinar. Por eso, debemos encontrar el momento para detenernos y comer.


Cuando hablamos de alimentación también hacemos referencia a la hidratación. Y aunque esta es pasada por alto por muchos de nosotros es importante tomar por lo menos un litro de agua al día y si tu trabajo exige un alto desempeño físico deberás beber suficiente agua para mantener el equilibrio hídrico del organismo. 


No ignores tu salud mental 


Existe una relación directa entre el estrés y la salud. El estrés puede provocar dolores de cabeza, tensión muscular y otros efectos negativos en el cuerpo y la vida cotidiana, por lo que es importante mantenernos mental y emocionalmente sanos durante la jornada laboral. Tómate un tiempo para hacer ejercicios de respiración o sal a tomar aire fresco, especialmente si te sientes estresado o abrumado en el trabajo.


Tu entorno de trabajo también puede tener un efecto dramático en tu salud mental y emocional. Intenta mantener tu puesto de trabajo limpio y organizado, y decora tu espacio con imágenes u objetos que te hagan feliz.


Usa las escaleras en vez del ascensor


Dentro de los hábitos saludables está realizar cualquier actividad física, sin embargo el porcentaje de personas sedentarias es bastante alto, pero una manera de fomentar el movimiento y ayudar a la parte física es usar escaleras. 


Subir las escaleras puede aumentar rápidamente el ritmo cardíaco, aunque sea por poco tiempo. Si no dispones de mucho tiempo para hacer ejercicio, subir las escaleras al ir y volver de la oficina es una forma estupenda de mejorar la circulación y la salud cardiovascular, además de favorecer tu salud mental. Además, los estudios demuestran que cada tramo de escaleras que subes a diario disminuye la edad de tu cerebro.


Ajusta tu vista


La mayoría de nosotros miramos fijamente el monitor o pantalla del computador todo el día, lo cual es bueno para la productividad en el trabajo, pero no es lo mejor para nuestra salud, sobre todo para nuestros ojos. 


Para descansar de las largas horas de ver una pantalla, enfoca un objeto lejano durante unos segundos. Puede ser una luz, otro edificio, una calle o incluso un árbol. Esta acción reducirá el riesgo de padecer dolencias oculares.


Duerme bien


El insomnio no solo afecta la productividad en el trabajo, también tiene consecuencias negativas en el organismo y en el estado de ánimo. Para evitar lo anterior, lo ideal es dormir al menos siete horas cada noche, esto aumenta el estado de ánimo y la productividad laboral. 


Estiramientos y buena postura


Si nuestro trabajo nos exige estar largas horas sentado puede afectar nuestra postura y salud. Las malas posturas se pueden corregir realizando estiramientos que a su vez ayudan a la circulación y alivian la presión que se ejerce sobre la columna vertebral u otras partes del cuerpo. 


Una mala postura puede provocar dolor de espalda u otras dolencias relacionadas con ella, por lo que es mejor estirarse periódicamente a lo largo del día. Simplemente recuerda una vez cada hora que debes levantarte y estirar los brazos, las piernas y la espalda.


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Crea hábitos


Los
hábitos saludables deben nacer de nosotros y estos son posibles cuando somos organizados con nuestro tiempo y quehaceres. Y aunque pareciera que el tiempo no alcanza, siempre hay tiempo para comer bien, hacer algo de ejercicio y compartir con la familia.  


La creación de hábitos es una parte importante del mantenimiento de un estilo de vida saludable. Más allá de ir al gimnasio con regularidad, es bueno centrarse en pequeñas cosas como intentar tener un número programado de descansos para caminar o estirarse a lo largo del día. Aunque cumplir con tu horario te ayudará a mantenerte sano, recuerda perdonarte si te saltas algo: mientras hagas todo lo posible por crear un horario de trabajo saludable, estarás cosechando los beneficios.


Esperamos que estos consejos te ayuden a mantener un estado de salud óptimo, sobre todo en estos momentos donde muchas oficinas volvieron a abrir y es obligatorio ir. 


Recuerda que en RecaVar, queremos promover un estilo de vida sano y que la sociedad tome conciencia de los ataques cerebrovasculares que cobran la vida de miles cada año. 

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